Bienvenido a Locales para Músicos



La web para encontrar locales de ensayo, salas de conciertos y estudios de grabación y para poner en contacto a músicos con intereses comunes





Si te registras puedes dar de alta locales, poner anuncios o dar de alta conciertos en la agenda.

Iniciar Sesión

¿te has olvidado del password?

Conectar con Facebook

¡Regístrate en un momento!


Sala de Conciertos Gran Teatre del Liceu

Más Locales Cercanos

Gran Teatre del Liceu

http://www.liceubarcelona.cat
Gran Teatro del Liceo, C/ La Rambla, 51-59, 08002 Barcelona, España
93 485 99 00

El Gran Teatre del Liceu, creado en 1847 en la Rambla de Barcelona, es un teatro de ópera que a lo largo de los años ha mantenido su función de centro cultural y artístico. Es uno de los símbolos de la ciudad.

(Extraido de la wikipedia)

Historia

En el año 1837, un Batallón de la Milicia Nacional, con Manuel Gibert Sans al frente, creó, en el Convento de Montsió, que se encontraba en los alrededores del actual Portal del Ángel, el Liceo Filodramático de Montesión.
La finalidad de la nueva entidad era, por una parte, promover la enseñanza musical (de aquí el nombre de Liceo) y, por otra, la organización de representaciones escénicas de teatro de ópera, por parte de los alumnos.
En 1838, la entidad cambió el nombre por el de Liceo Filarmónico Dramático de S.M. la Reina Isabel II.
La falta de espacio y las presiones de las monjas, antiguas propietarias del convento, que habían recuperado unos derechos que habían perdido, y reclamaban volver, motivaron que el Liceo Filarmónico Dramático de S.M. la Reina Isabel II abandonara el Convento de Montesión.
A cambio, le fue concedida la compra del edificio del Convento de los Trinitarios, situado en el centro de la Rambla de Barcelona. Inmediatamente se iniciaron los trabajos de demolición de este convento para edificar un nuevo edificio capaz de acoger todas las actividades del Liceo.
A diferencia de otras ciudades europeas, donde la monarquía se hacía cargo de la construcción y mantenimiento de los teatros de ópera, en Barcelona la construcción del Gran Teatro del Liceo se tuvo que hacer mediante las aportaciones de accionistas particulares, según una estructura similar a una sociedad mercantil. Este hecho condicionó hasta la estructura del nuevo edificio, falto, por ejemplo de palco real.
Los gestores del Liceo Filarmónico Dramático de S.M. la Reina Isabel II encargaron a Joaquim de Gispert d?Anglí un proyecto que hiciera viable la construcción del nuevo edificio. Este proyecto preveía la creación de dos entidades: la Sociedad de Construcción y la Sociedad Auxiliar de Construcción. Los accionistas de la primera obtenían, a cambio de sus aportaciones económicas, el derecho de uso a perpetuidad de algunos palcos y butacas del futuro teatro. En cambio, los de la segunda aportaban el resto de dinero necesario a cambio de la propiedad de otros espacios del edificio.
La Sociedad Auxiliar de la Construcción sería el origen del Círculo del Liceo. Miquel Garriga i Roca fue el arquitecto encargado de la construcción del Liceo. Las obras se iniciaron el 11 de abril de 1845, y el Teatro se inauguró el 4 de abril de 1847.



Actualmente, tras la reordenación jurídica que se acordó en 1994 para poder afrontar su rehabilitación, el Liceu es un teatro de titularidad pública, propiedad, a partes iguales, de las cuatro principales administraciones presentes en Barcelona: la Generalidad de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona, la Diputación de Barcelona y el Ministerio de Cultura de España.
La administración es gestionada por la Fundación del Gran Teatre del Liceu, que ha contado con la incorporación, además de las citadas instituciones, del Consejo de Mecenazgo y la antigua Sociedad del Gran Teatro del Liceo.


El edificio

El Gran Teatre del Liceu se erigió en el sector central de la popular Rambla de Barcelona, paseo emblemático de Ciutat Vella , que ha mantenido a lo largo del tiempo su protagonismo y abigarrada personalidad.

Del edificio tradicional, se salvaron del incendio de 1994, y se han mantenido tal como eran, la parte de la fachada central de La Rambla, el vestíbulo principal con las escalinatas y el Saló dels Miralls (Salón de los Espejos). La fachada tiene una presencia relativamente modesta con relación al interior. El amplio vestíbulo, con grandes columnas, lleva a la gran escalera principal de mármol (1861) ?presidida por una escultura modernista de Venanci Vallmitjana, Alegoría de la Música (1901)? que conduce al anfiteatro y al Saló dels Miralls. Este salón constituye el primer Foyer o sala de descanso del Teatro, restaurado en 1877 por el arquitecto Elies Rogent en el característico estilo tardo-isabelino propio de la época y decorado por Josep Serra y Josep Mirabent.

La fiel reconstrucción de la sala y del escenario, totalmente destruidos por el fuego, ha permitido diversos cambios y mejoras.

La sala
La sala, inspirada explícitamente en el Teatro alla Scala de Milán, tiene la planta en forma de herradura (profundidad y anchura máximas de 33 y 27 m), con platea y cinco niveles. Su aforo es de 2.292 espectadores, uno de los mayores de los teatros de ópera europeos.

Los palcos ?con pequeños antepalcos? se sitúan en el proscenio, alrededor de la platea, y en el anfiteatro.

El conjunto del proscenio sigue la recomposición de este espacio, realizada en 1909, con un gran arco central que nace de los montantes laterales, bien definido cada uno de ellos por las dos columnas corintias que contienen los pretiles de los cuatro pisos de palcos de proscenio, los más amplios y lujosos del Teatro.

La ornamentación
La ornamentación de la sala reproduce también la renovación decorativa de 1909, realizada con molduras de yeso doradas y policromadas, que responde a la superposición de elementos de épocas y gustos distintos dentro de la habitual suntuosidad de los teatros de ópera decimonónicos. Las lámparas son de latón, con su característica forma de dragón y tulipas de cristal. Las butacas de la platea son de hierro colado y terciopelo rojo.

En cuanto a los elementos contemporáneos incorporados a la ornamentación final, cabe citar la intervención del artista Perejaume, quien decoró los ocho óculos del cielo raso y los medallones del arco de proscenio, recreando la platea del Liceu como un paisaje natural. La cortina de la boca de escena es obra del diseñador Antoni Miró, con una gran y sobria ondulación del terciopelo rojo rematada por una guardamalleta drapeada, también de terciopelo i la lámpara en forma de casquete esférico, en el centro del cielo raso, concebida por Ignasi de Solà-Morales constituye una plataforma tecnológica muy útil.

El escenario
El escenario del nuevo Liceu está dotado de unos equipamientos de gran envergadura y complejidad que permiten una enorme agilidad en el cambio de escena y, a su vez, la alternancia de títulos en la programación.

El Foyer
El nuevo Foyer, espacio de descanso y encuentro para el público, situado bajo la sala grande, es un espacio polivalente donde se encuentra el bar-restaurante principal del Teatro. Se utiliza también como sala para conciertos y representaciones de pequeño formato, sesiones informativas previas a cada representación operística, como espacio social para reuniones, banquetes y fiestas, etc.

El Espai Liceu
El Espai Liceu, inaugurado en el año 2002, se sitúa en la primera planta del sótano, con acceso desde La Rambla y la calle Sant Pau, y en comunicación con el Foyer. Se trata del punto de partida de las visitas al Liceu y, al mismo tiempo, de un espacio cultural y comercial de promoción del Teatro y del mundo de la lírica. Cuenta con un pequeño auditorio de forma esférica donde se puede escuchar música y visualizar proyecciones operísticas, una mediateca, una cafetería y el espacio comercial relacionado con el mundo musical y artístico gestionado por la empresa Laie.

Incidentes en el teatro

Durante los primeros treinta años de vida del teatro, la rivalidad con el vecino Teatro Principal --el teatro más antiguo de la ciudad y, hasta el momento, el teatro de ópera más importante-- fue motivo de incidentes diversos (peleas entre aficionados, "contraprogramación" de óperas, carreras por estrenar uno antes que el otro...). Una popular obra de teatro de Frederic Soler, "Liceístas y cruzados" retrata esta competencia.
En 1893, el anarquista Santiago Salvador tiró una bomba en la platea del Liceo que causó 20 muertos.
Otro incidente histórico afectó al teatro a comienzos de la Guerra Civil española cuando, en 1936, el Liceu fue expropiado, nacionalizado y convertido por las autoridades republicanas en Teatro del Pueblo Catalán. En 1939, a principios de la dictadura franquista, volvió a los antiguos propietarios en el mismo régimen de siempre.
El Liceo ha sufrido dos incendios que lo han destruido totalmente. El primero el 14 de abril de 1861, que destruyó totalmente la sala y el escenario, y que obligó a tener cerrado el teatro, por las tareas de reconstrucción, durante un año y seis días.
El segundo el 31 de enero de 1994 (mismo día del cumpleaños de Gaudí), y ha sido reconstruido y mejorado, respetando su decoración y estilo originales, responsables de su apreciada sonoridad, pero con importantes mejoras tecnológicas que lo convirtieron en uno de los teatros más modernos del mundo.


El incendio de 1994

Entre las diez y media y once menos cuarto de la mañana del 31 de enero, mientras dos operarios trabajaban en la reparación del telón de acero que, en caso de incendio, tenía que impedir que el fuego pasara del escenario a la sala (otra ironía del destino), las chispas de su soplete prendieron en los pliegues del cortinaje fijo de tres cuerpos que escondía la parte alta del escenario. Algunos trozos encendidos de ropa cayeron al suelo, y aunque los trabajadores se apresuraron en apagarlos y se bajó el telón de acero, todo fue inútil: las llamas ya habían saltado al telón de terciopelo y subían hasta el telar y el techo.
El fuego era ya incontrolable cuando los bomberos llegaron minutos después de las once. Puede que un poco tarde porque, según parece, los trabajadores habían tratado de apagar el fuego con los medios a su alcance en vez de llamar inmediatamente a los servicios de extinción.
El incendio causó una gran conmoción en la sociedad catalana y en el mundo de la ópera en general. Gracias al apoyo de las instituciones, al patrocinio de empresas, y a las donaciones particulares, fue reconstruido en un tiempo récord, pudiendo de nuevo abrir sus puertas en 1999.


Círculo del Liceo

Pocos meses después de la fundación del Liceo, el 20 de noviembre de 1847, se creó el Círculo del Liceo, según la fecha de inscripción de los 125 fundadores que consta en el primer libro de registro de socios. El primer artículo de los estatutos dice:
El Círculo del Liceo es una asociación que tiene por objeto proporcionar a sus individuos los recreos y entretenimientos de la buena sociedad y es ajena a todo acto que tenga tendencia política.
El Círculo del Liceo es un exclusivo club privado, de modelo inglés, del cual sólo podían ser socios los hombres o sus viudas. Con la reciente inauguración después del incendio del 1994, se originó una fuerte polémica por la prohibición que seguía vigente de negar a cualquier mujer ser socio del club: 8 mujeres que habían hecho la solicitud fueron rechazadas (incluida Montserrat Caballé). Los estatutos fueron cambiados y en 2001 dos empresarias catalanas, Adela Subirana y Magda Ferrer-Dalmau, formalizaban su inscripción, convirtiéndose en las primeras mujeres en formar parte del Círculo del Liceo.
Actualmente, el Círculo cuenta con 1.100 socios. Después del incendio del Liceu el 31 de enero de 1994, el club cerró casi un año, pero posteriormente mantuvieron abiertos sus salones y el restaurante. Se aprovechó este periodo para restaurar sus dependencias. Como club recreativo, acoge a lo más granado de la sociedad catalana siendo el primer club social de la ciudad. La propia historia del Círculo ha permitido que la entidad tenga un patrimonio artístico fenomenal.
Dispone de una biblioteca más que notable. En la mayoría de sus dependencias se puede disfrutar de decoración modernista. Hay cuatro ventanales en el vestíbulo inferior que son un testimonio directo de la fuerte influencia del wagnerismo en la cultura catalana de principios del siglo XX. Pero además del mobiliario y del interiorismo, el Círculo es una muestra viva y esplendida de esculturas y del arte de la marquetería y dispone de una galería de esmaltes, grabados, aguafuertes y óleos de los mejores artistas catalanes de la época, como Alexandre de Riquer, Santiago Rusiñol, Modest Urgell Inglada y Francesc Miralles, entre otros.
La obra más famosa del Círculo del Liceo es el conjunto mural, de doce óleos sobre tela, encargados a Ramon Casas e instalados en la famosa Rotonda del Círculo. Cada uno de los doce plafones, la obra más ambiciosa de Casas, según sus estudiosos, se inspiran en un tema musical.
El Círculo del Liceo ha abierto sus salas al público catalán en contadas ocasiones.
Sala de Conciertos Gran Teatre del LiceuSala de Conciertos Gran Teatre del LiceuSala de Conciertos Gran Teatre del Liceu
Modificar Local
Nuevo Anuncio
Cambiar fuente
Confirma
No
Si
    Local sin comentarios, sé el primero en escribir uno. No hace falta estar registrado para escribir aquí.
    Comentario nuevo:



Local sin agenda de conciertos.
Concierto nuevo:

*Nombre del grupo:

Web:                         

*Fecha:                        *Hora:

Precio entrada:       



    

AYUDA